El imán de la cercana mezquita maneja altos decibelios, pero no pudo con nosotros. Imposible levantarse a las 6,30 (1,30 hora española). Demasiado pronto para el cambio. Pero mañana sí tendrá que ser, porque hoy hemos pasado el día a nuestra bola y mañana hemos quedado con el amable taxista que nos trajo desde el aeropuerto y nos propuso llevarnos a Borobudur, Prambanan y un volcán de nombre desconocido. A las 8 vendrá a buscarnos.
Y aunque hemos salido del hotel una hora más tarde de lo previsto, el día nos ha cundido un montón: hemos hecho el circuito que propone la Lonely, dedicando bien de tiempo a cada cosa y pasando calorcito, que el sol calienta lo suyo, pero no mucho, ciertamente. Hasta hemos ido a un par de agencias para decidir qué hacer en nuestra etapa al este de Java (ver post del día 10 de agosto).
Lo que más nos ha gustado ha sido el espectáculo nocturno de teatro de sombras con marionetas al que hemos asistido en el museo de las marionetas. Es tope curioso ver las sombras, pero ver detrás de la pantalla todo lo que se mueve, los instrumentistas, cantantes mujeres y hombres, y la agilidad con la que se desenvuelve el artista que maneja las marionetas, es algo impresionante.
Otra de las sorpresas del día ha sido la visita a dos mercados, y es que los mercados siempre nos atraen por su colorido, los olores, la gente..., nunca defraudan.
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